Ferrovial, a través del programa Infraestructuras Sociales, ha contribuido a dotar de acceso al agua potable a uno de los distritos más pobres de la región norte de Ghana.
El problema de la escasez de agua afecta a más del 40% de la población a nivel mundial, un dato alarmante y que preocupa aún más teniendo en cuenta los graves efectos del cambio climático. Naciones Unidas incluyó, dentro de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para 2030, el acceso universal al agua potable. Para conseguirlo es necesario invertir en la construcción de infraestructuras adecuadas y, además, proporcionar los conocimientos necesarios a las poblaciones más afectadas.
Desde su puesta en marcha en 2011, el programa Infraestructuras Sociales de Ferrovial ha conseguido mejorar la vida diaria de miles de personas en riesgo social de África y América Latina mediante la creación de infraestructuras que mejoren, doten de cobertura y acceso al agua potable a la población. Uno de los proyectos más especiales y con mayor éxito ha tenido lugar en Zabzugu, uno de los distritos más pobres de la Región Norte de Ghana, donde el 62,7% de las comunidades no dispone de agua suficiente para abastecerse.
Ferrovial se comprometió, junto con World Vision, a dotar de agua potable a cuatro comunidades, una escuela y un centro de salud a este distrito. Todo ello a través de la mecanización con energía solar de cuatro pozos. Además de ser un sistema que ayuda a reducir la dependencia del uso de electricidad, es una opción económica y sostenible frente a otras fuentes de energía convencionales. Además, es una fuente renovable e inagotable y de fácil mantenimiento.
El proyecto arrancó en enero de 2017 y ahora conocemos los resultados del esfuerzo de Ferrovial, World Vision Ghana y de todos los voluntarios. Ha beneficiado de forma directa e indirecta un total de 7.940 personas incluyendo a los habitantes de seis comunidades diferentes (Sabare I, Tasundo I y II, Moncheni y Zokurli A y B), a los alumnos de seis escuelas y a los usuarios del centro de salud de Sabare.
Un tema esencial para prolongar los beneficios del proyecto era dotar a la población de los conocimientos necesarios para mantener el cuidado e higiene del agua, algo que han conseguido sin problemas. De hecho, se ha formado a casi 3.000 personas en el buen uso del agua y los sistemas al cierre del proyecto, y esperan seguir haciéndolo durante los próximos meses.
Respecto a las herramientas necesarias para lograr el principal objetivo, Ferrovial se ha encargado de la mecanización de cuatro pozos con bombas de extracción solares y en cada comunidad, centro de salud y escuela se han instalado tanques y fuentes en puntos de fácil acceso para que el agua llegue directamente y esté disponible para el mayor número de personas, dando prioridad a la población más vulnerable, esto es, niños y enfermos. Se trata de un proyecto que ha sido posible gracias a la involucración de todas las partes implicadas.
Impacto social en una población implicada
Abrir el grifo y poder beber agua potable puede parecer una acción totalmente normal, pero para la población de las comunidades rurales de este distrito, donde tienen que caminar varios kilómetros para encontrar agua, supone todo lo contrario. El acceso a agua potable ha transformado su vida y el impacto ha sido muy positivo. Uno de los principales beneficios ha sido la mejora de las condiciones y hábitos higiénicos tanto en las comunidades como en las escuelas y el centro de salud. El acceso al agua potable ha mejorado la asistencia al colegio por parte de los más pequeños y se ha reducido la incidencia de enfermedades, especialmente las diarreicas y la fiebre tifoidea.
El compromiso de las comunidades ha sido uno de los factores que ha hecho posible la eficacia del proyecto, ya que han liderado el proceso de decisión de la ubicación de las fuentes y tanques y han definido, cada una de ellas, su propio plan de sostenibilidad de agua. Además de la instalación de sistemas, cuatro equipos de gestión de agua y saneamiento, así como voluntarios y mecánicos han sido formados en la correcta gestión de sistemas. Un total de 2.915 personas han sido formadas en el uso higiénico del agua y en el cuidado ambiental y, desde World Vision, esperan seguir formando al resto de beneficiarios en los próximos meses.
Datos recientes de la OMS y UNICEF estiman que 2.100 millones de personas carecen de acceso a servicios de agua potable gestionados de manera segura y para 2025 la mitad de la población mundial vivirá en zonas con escasez de agua. Este es sólo un paso más hacia uno de los ODS para 2030, ya que sigue habiendo miles de personas que carecen de agua potable y debemos garantizar que todos disfruten de un acceso seguro.
