- La carretera fue diseñada para preservar el medioambiente y el legado cultural de la zona, su patrimonio, flora y fauna, así como la calidad de vida de los residentes
- Los premios de la IRF (International Road Federation) han reconocido a 11 proyectos de todo el mundo, y resaltan los logros medioambientales del proyecto
La Federación Internacional de Carreteras (IRF) ha anunciado los ganadores de los premios 2020 IRF Global Road Achievement Awards, una competición mundial para reconocer los logros sobresalientes de los profesionales de la carretera.
En esta edición, la IRF ha reconocido a 11 proyectos de todo el mundo, cada uno de los cuales lidera el camino de la innovación en las principales disciplinas de las carreteras y autopistas. La selección fue hecha por un panel internacional de especialistas en desarrollo de carreteras.
La circunvalación de Toowoomba, que se inauguró íntegramente en septiembre de 2019, es el primer contrato de concesión de carreteras adjudicado a Ferrovial en Australia. El proyecto de $ 1,6 mil millones es una ruta de desvío de 41 kilómetros al norte de Toowoomba. Conecta la autopista Warrego en Helidon Spa en el este con la autopista Gore en Athol en el oeste a través de Charlton.
El proyecto fue extremadamente complejo y técnicamente un reto en el que se emplearon soluciones innovadoras de ingeniería de diseño y las mejores prácticas en mitigación medioambiental con más de 20 millones de metros cúbicos de movimientos de tierra, 24 estructuras incluido un viaducto de 800 metros, seis pasos subterráneos para la fauna y cuatro millones de metros cuadrados para la rehabilitación de las tierras afectadas.
Toowoomba fue diseñada para preservar el medioambiente y el legado cultural de la zona, su patrimonio, flora y fauna, así como la calidad de vida de los residentes.
Medidas medioambientales
Las principales medidas medioambientales aplicadas incluyen la protección de la vegetación y de una especie de reptil autóctono la Delma torquata de la que se trasladaron 114 especies, la gestión de la calidad del agua durante la construcción, la conservación de los suelos de las tierras agrícolas adyacentes y una impecable gestión de la comunidad, de la cultura y del patrimonio indígena.
Por otro lado, los diseños innovadores y sostenibles han ayudado a mantener los costes del presupuesto mientras se aseguraban la implementación de las mejores prácticas medioambientales. Por ejemplo, el uso insitu de plantas de asfalto y hormigón redujeron los costes de transporte y las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, cuando ha sido posible, los extractos de material rocoso han sido reusados para producir los agregados del pavimento, dando como resultado suelos eficientes y así, manteniendo el resultado sostenible del proyecto. Los límites del desbroce se minimizaron para preservar el hábitat de la vegetación y múltiples ejemplares de árboles fueron replantados.