El pasado 1 de septiembre tuvo lugar el acto de puesta en servicio del nuevo enlace entre la A2 y la AP7 presidido por la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, que estuvo acompañada por la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, y por el secretario general de Infraestructuras de Mitma, Sergio Vázquez Torrón, además de los alcaldes de la zona.
El proyecto supone una importante reducción de los tiempos de viaje, con un recorte de 7,5 km del recorrido actual, una mejora de la movilidad para los usuarios del Área Metropolitana de Barcelona y un gran beneficio para los municipios de la zona.
Por parte de Ferrovial Construcción asistieron al evento Ignacio Clopés, director de Construcción Iberia, Latam y Otros Mercados, Juan Lozano, director de Construcción Obra Civil, Joaquín García, director Región Mediterránea, Kenneth Martínez, gerente Obra Civil y Josep Usach, jefe de obra fase 3, Albert Campo jefe de obra fase 2 y Juan Muñoz, jefe de obra fase 1; Joan Farrús y Ricard Corominas como Jefes de Producción, Gonzalo Manso, ingeniero en formación, Manuel Lopez, Victor Lema, Emilio Pazos y Alberto Serra como encargados, Jose Rios y Jose Mª Castelló como jefes de topografía, Fernando Garcia-Patos y Javier Cabanillas como topógrafos, Miguel Delgado como técnico de seguridad, Jordi Garcia Alegre como técnico de calidad y Andres Diaz y Miguel Angel Montoro como departamento administrativo.
Las obras han consistido en la ejecución de un nuevo vial de dos calzadas separadas con sección de autovía uniendo la Autovía A2 con la Autopista AP7 y facilitando los enlaces LLeida-Girona y Girona – Lleida cruzando el río Llobregat, la riera de Rubí y las vías ferroviarias de Adif a través del nuevo viaducto del Llobregat. Conectando además los municipios de Sant Andreu de la Barca y Pallejá con los de Castellbisbal y Rubí y con la carretera C-1413a de Molins de Rei a Vic.
El presupuesto de las obras asciende a 74,57 millones de euros.
La longitud aproximada total de viales que ha comprendido la actuación es de 6,5 km, teniendo el tronco de la autovía de enlace una longitud de 2,5 km.
La actuación consta de diversas estructuras. La principal, el denominado “viaducto del Llobregat”, consiste en dos estructuras paralelas independientes de 874 y 836 metros, respectivamente. Se trata de dos estructuras mixtas de canto variable entre 3,5 y 5 metros, con cajón de acero corten y losa superior de hormigón, con pilas de sección elíptica cimentadas por pilotes de 30m de longitud.
Adicionalmente, se han ejecutado dos pasos superiores para la carretera C-1413a y salvar la AP7, además de la ampliación de 4 pasos inferiores, 2 en la Autovía A2 y los pasos inferiores del cementerio Roques Blanques y Canteras Berta en el ámbito de la AP7.
Igualmente se ha construido 19 muros de diferentes tipologías además de diversas obras de drenaje transversal.
También se ha realizado la restitución ambiental e integración paisajística de todo el ámbito del proyecto. En concreto, la restauración del entorno del río Llobregat y de la riera de Rubí, la integración ambiental en la zona de contacto con el Parc de Collserola y la restauración e integración de los distintos depósitos de tierras ejecutados.
