El consorcio formado a partes iguales por Ferrovial Agroman, filial de Ferrovial, y la constructora británica Laing O’Rourke, ha sido seleccionado por London Underground para llevar a cabo la ampliación de la línea Northern Line, en el Metro de Londres. El proyecto, que comprende la excavación de un nuevo túnel y la creación de dos estaciones, alcanza un valor de 500 millones de libras (unos 628 millones de euros).
El consorcio formado a partes iguales por Ferrovial Agroman, filial de Ferrovial, y la británica Laing O’Rourke, ha sido seleccionado por London Underground para el diseño y la construcción de la ampliación de la línea Northern Line, en el Metro de Londres. El contrato ha sido ya firmado por ambas partes. El proyecto, que alcanza un valor de 500 millones de libras (unos 628 millones de euros), tiene prevista su finalización en el año 2020.
Ferrovial Agroman y Laing O’Rourke ampliarán la línea Northern Line desde la estación de Kennington, en el sur de la ciudad. Los trabajos incluyen la construcción de dos nuevas estaciones, Nine Elms y Battersea, con dos pozos de ventilación adicionales, y un túnel de 6 kilómetros con un diámetro interno de 5,1 metros.
La nueva infraestructura cubrirá un nuevo área donde trabajarán 25.000 personas y residirán 16.000 familias, acortando a menos de 15 minutos el trayecto hasta el West End y la zona de negocios de la City, y reduciendo el tráfico de pasajeros en la estación de Vauxhall.
Con esta nueva adjudicación, Ferrovial vuelve a evidenciar su capacidad para la construcción de sistemas subterráneos de transporte. Actualmente el consorcio participado por Ferrovial Agroman está desempeñando un papel fundamental en el desarrollo de Crossrail, con la excavación de dos túneles, la construcción de la estación de Farringdon y la realización de los accesos y cavernas de las estaciones de Bond Street y Tottenham Court Road. Crossrail, el mayor proyecto de ingeniería civil que se está desarrollando en Europa, incrementará en un 10% la capacidad ferroviaria de Londres.
Además, recientemente el consorcio en el que participa Amey, filial de Ferrovial Servicios, fue seleccionado para operar y mantener durante seis años y medio el Docklands Light Railway, la red de tren ligero del este de Londres, por 700 millones de libras.
