Ferrovial Agroman inició en 5 de Febrero de 2015 la rehabilitación de la Biblioteca Les Corts Vidre, un edificio de 1924 con más de 4.200 m2 situado en Barcelona, clasificado como Patrimonio Artístico y con un área de influencia de 88.000 habitantes. La obra, ya terminada, se ha ejecutado para el Ayuntamiento de Barcelona con un presupuesto de 5.867.626 €.
El proyecto surge de la voluntad del Ayuntamiento de la ciudad de promover la construcción de edificios con estrictos criterios de sostenibilidad, por lo que la actuación de la UTE Ferrovial Agroman-construcciones Deco, se ha centrado en adaptar el conjunto de la fábrica, formado por tres edificios, a un nuevo uso, tanto la nave industrial, al norte de la parcela, como los dos edificios anexos.
Las actuaciones de rehabilitación y mejora de espacios se han llevado a cabo en los edificios que conforman el conjunto de lo que era la antigua fábrica construida en 1924. El arquitecto Antoni Pons Domínguez ideó entonces un proyecto según el racionalismo más moderno en la época, con materiales innovadores como el hormigón y el vidrio y un exterior sobrio y sin adornos.
La transformación abarca también la fachada principal que se ha modificado con la creación de una gran abertura que resuelve el acceso, a la vez que abre el edificio a la ciudad comunicando su nueva vocación pública.
En la estructura destaca su tejado en forma de dientes de sierra que, combinando el metal y el vidrio, permite la entrada directa de luz natural, engrandecida gracias al color blanco que se ha elegido para desarrollar los espacios interiores.
La nave de acceso es la pieza principal del conjunto, tanto por su tamaño, como por su valor patrimonial, y se ha convertido en eje vertebrador del proyecto gracias a la construcción de un atrio luminoso a doble altura que incorpora escaleras abiertas de acceso a las plantas superiores.
El edificio se encuentra distribuido en plantas baja, de altillo, primera, segunda y planta de cubierta. En la planta baja se sitúa el acceso a través de un porche exterior desde el que se accede al vestíbulo principal. En ella se desarrollan los usos más públicos de la biblioteca, con las salas de fondo general y lectura. A su lado, el atrio que acompaña a las plantas superiores y más allá la gran nave principal de lectura junto al núcleo de comunicaciones y el Laboratorio de Fabricación Digital (Fab-Lab). El altillo está destinado a fondo general; a través de una grada-escalera se acede al resto de espacio de lectura situado en la primera planta. Esa planta es una nave acristalada donde se ubica el espacio de formación. La segunda planta acoge dos usos diferenciados, una zona de uso restringido a los trabajadores con oficinas, salas de descanso y almacenes, y otra de uso público donde se sitúan varias aulas de usos múltiples, almacén y sala de control.
La planta de cubierta mantiene la separación original en dos edificios que en el edificio A mantiene la cubierta plana invertida con acabado engrava, donde se ha reservado espacio para ubicar los elementos exteriores de climatización cubiertos con revestimiento fonoabsorbente que evita la contaminación acústica. El edificio B conserva la morfología original de cubierta inclinada tan característica de los edificios industriales de la época. En ambos edificios se ha reforzado la estructura existente para que pueda soportar el nuevo estado de cargas y se les ha dotado de características sismo-resistentes y de resistencia al fuego.
El Fab-lab se sitúa en la planta baja del edificio «B». Su ubicación en esquina permite crear un doble acceso; el principal desde el vestíbulo del edificio y uno secundario planteado desde la caller de Evarist Arnús. Este segundo acceso funciona como salida de emergencia, como entrada de mercaderías y en caso de que el Fab-lab funcione en el horario en que el resto del equipamiento esté cerrado. Para poder aislar acústicamente esta zona de la de biblioteca, el ámbito más ruidoso del Fab-Lab se encuentra en un recinto cerrado con un doble cerramiento con cristal acústico.
La Biblioteca de Les Corts Vidre será, una vez en uso, una de las bibliotecas más grandes de Barcelona y es el primer edificio público de la ciudad que opta al certificado internacional de sostenibilidad BREEAM (Building Research Establishment Environmental Assessment Methodoloty), un reconocimiento ya alcanzado por inmuebles privados como la Torre Agbar, la sede corporativa de MRW, el hotel Le Meridien o el centro comercial La Maquinista, entre otros. BREEAM es método de evaluación y certificación de la sostenibilidad de la edificación creado en Inglaterra en 1990. Es líder a nivel mundial con más de 270.000 edificios certificados en 63 países.
El equipo de obra, dependiente de Joaquín García, Director de Cataluña y Francia ha estado formado por Santiago López, Gerente de la UTE; Jordi Moreno, Encargado de Obra; y Alfonso Perera, Administrativo.