El documento publicado por la ONU sugiere que los países ricos destinen hasta el 2% de su Producto Interior Bruto para ayudar a los más pobres a aliviar los efectos del calentamiento global. Estos páíses demandan a los países en desarrollo que se esfuercen más por limitar sus emisiones.
Pese a que la recesión económica ha mermado la voluntar de muchos gobiernos de tomar medidas contra el calentamiento global, muchas acciones se están llevando a cabo en este ámbito.
El panel de la ONU ha afirmado que las naciones desarrolladas deberían recortar entre un 25 y un 40% por debajo de los niveles de 1990 para el 2020. Sin embargo, el presidente de los Estados Unidos, país que no ratificó el Protocolo de Kioto, quiere reducir las emisiones a los niveles de 1990 para el 2020, lo que supone un recorte del 14% con respecto a los niveles de 2007.
Fuente: Reuters