EFE, MADRID.- La ONG Ecoespaña ha comenzado la distribución de bolsas de tela para hacer la compra y animar a los consumidores a "decir no a tanta bolsa de plástico". Las bolsas están hechas en algodón crudo, son lavables y cuentan con costuras reforzadas para que puedan ser reutilizadas muchas veces. Su distribución ha comenzado en el centro de Madrid; en lugares como el mercado de la Cebada del popular barrio de Lavapiés.
En cada lado de la bolsa hay dos lemas, escritos con tinta ecológica. El de una cara de la bolsa es "Yo tampoco soy una bolsa de plástico". Según señalan fuentes de la ONG con esta frase quieren poner de manifiesto que "el plástico tarda mucho en destruirse, es una fuente de contaminación ambiental de primer orden, y en el mar daña la vida de los animales". El problema sería enorme porque, según fuentes que citan de El Guardian, "en el mundo se utilizan más de 1,2 billones de bolsas de plástico al año, lo que supone una media de 300 por cada adulto o 1 millón de bolsas cada minuto. La mayoría de ellas son usadas unos 12 minutos antes de ser desechadas y luego pueden permanecer durante décadas en el medioambiente."
El lema que ocupa la otra cara de la bolsa es "Contra el calentamiento global, compra local". Al respecto, Ecoespaña señala que "la mejor forma de ayudar a frenar el cambio climático es comprar local siempre que se pueda; así se ahorran emisiones de gases contaminantes de efecto invernadero del transporte de mercancías".
La ONG señala que ha remitido este tipo de bolsas a la Princesa de Asturias, la ministra de Medio Ambiente, el alcalde y la presidenta de la Comunidad de Madrid. Asimismo, han solicitado a los presidentes de las grandes superficies y mercados municipales que pongan a disposición de sus clientes iniciativas similares propias.
En cada lado de la bolsa hay dos lemas, escritos con tinta ecológica. El de una cara de la bolsa es "Yo tampoco soy una bolsa de plástico". Según señalan fuentes de la ONG con esta frase quieren poner de manifiesto que "el plástico tarda mucho en destruirse, es una fuente de contaminación ambiental de primer orden, y en el mar daña la vida de los animales". El problema sería enorme porque, según fuentes que citan de El Guardian, "en el mundo se utilizan más de 1,2 billones de bolsas de plástico al año, lo que supone una media de 300 por cada adulto o 1 millón de bolsas cada minuto. La mayoría de ellas son usadas unos 12 minutos antes de ser desechadas y luego pueden permanecer durante décadas en el medioambiente."
El lema que ocupa la otra cara de la bolsa es "Contra el calentamiento global, compra local". Al respecto, Ecoespaña señala que "la mejor forma de ayudar a frenar el cambio climático es comprar local siempre que se pueda; así se ahorran emisiones de gases contaminantes de efecto invernadero del transporte de mercancías".
La ONG señala que ha remitido este tipo de bolsas a la Princesa de Asturias, la ministra de Medio Ambiente, el alcalde y la presidenta de la Comunidad de Madrid. Asimismo, han solicitado a los presidentes de las grandes superficies y mercados municipales que pongan a disposición de sus clientes iniciativas similares propias.
