(Europa Press).- La Inversión Socialmente Responsable (ISR) continúa avanzando en España pero no lo hace al ritmo deseado. Según el Observatorio 2007 de la IRS en España elaborado por el Instituto de Innovación Social de ESADE, su director, Ignasi Carreras, y Rosario Balaguer, coautora, este tipo de inversión creció el pasado año un 9% en España --un buen dato si tenemos en cuenta que en 2005 lo hizo sólo un 2,3%--, pero no tan bueno si sabemos que en Europa este crecimiento fue, en las mismas fechas, del 41% respecto a 2005, alcanzando ya los 34.000 millones de euros.
Pese a ello, y a corroborar según estos datos que la ISR en nuestro país continúa desarrollándose aunque de forma "lenta", ambos autores consideraron hoy --durante la presentación de este documento en un encuentro con la prensa en la sede madrileña de ESADE-- que el fenómeno del cambio climático "actuará sin duda como una clara palanca para el empuje definitivo de este tipo de inversión, porque los riesgos detectados por las empresas y los inversores en relación a este fenómeno son cada vez más evidentes. Y es que "el cambio climático se ha incorporado a la gestión del riesgo financiero en los fondos de inversión como un aspecto más", asegura el documento.
Otros datos de este Observatorio 2007 --basados en el envío de cuestionarios y análisis a 25 empresas gestoras de fondos españolas-- señalan que el 80% de las entidades encuestadas "recomendarían una ISR antes que una inversión tradicional en el caso de que ambas tuvieran el mismo riesgo. Además, añade que a España "le está costando despegar" en esto de la ISR, frente a países que avanzan con mucha fuerza como Reino Unido o Francia. En nuestro país estas inversiones suponen tan sólo el 0,42% de los fondos totales invertidos --apenas 1.125 millones de euros--.
La respuesta a este poco desarrollo de la ISR en España "no es la falta de oferta de fondos de este tipo, ni la falta de competitividad o de rentabilidad, sino que es un problema de demanda", según explicó Carreras. Es cierto que, respecto a 2005 hay más oferta de este tipo de fondos para elegir --de 14 se ha pasado a 18 en 2006 y de 17 a 35 en cuanto a los fondos extranjeros de ISR gestionados en España--, pero aún así sigue sin 'despegar' por la falta de demanda, y más concretamente "de demanda institucional", insistió Carreras.
Actualmente Reino Unido, Francia, Bélgica y Suiza acumulan el 63% del patrimonio invertido en ISR en Europa y aunque es cierto que las gestoras en España "presentan un mayor compromiso con este tipo de inversiones porque ven que su rentabilidad es adecuada y el interés de los clientes ha crecido, deben desempeñar un papel más proactivo a la hora de promocionar este tipo de productos con sus clientes", opinó Carreras, que añadió que, por el momento, han sido las ONG y las instituciones religiosas las que han estado actuando de "locomotoras" para impulsar esta inversión.
En general, y según el estudio, muchas de las gestoras encuestadas --96%-- considera que es un producto que "deben ofrecer a los clientes" por compromiso y conciencia. La segunda razón, con un 20% es "porque lo demandan los inversores" y con un 16% se encuentran las gestoras que lo ofrecen porque creen que es un producto "rentable a largo plazo", un dato positivo si se tiene en cuenta que Rosario Balaguer realizó un estudio semejante en 2004 y era "nulo" el número de gestoras que consideraba rentables estos fondos.
En último lugar, el 8% consideraron que contaban con estos fondos por cuestiones de imagen y reputación: no por aumentarla, sino por evitar su deterioro en caso de no contar con productos como estos. Muchas, además, reconocen que los ofrecen porque "los ofrece la competencia", pero admiten que, por parte de los clientes, aún se demandan poco.