(Europa Press).- El Parlamento Europeo pidió ayer aumentar hasta el 20% el porcentaje de uso de energías renovables en la calefacción y el aire acondicionado de aquí a 2020 y respaldó el acuerdo de los Veintisiete de imponer un objetivo vinculante del 10% de biocarburantes para el sector de los transportes en el mismo plazo.
En un informe sobre el "programa de trabajo de la energía renovable en Europa", los diputados reclamaron a la Comisión que, tal y como ha prometido, presente una propuesta legislativa antes de finales de año sobre renovables que permita lograr el objetivo de llegar en 2020 al 20% de estas fuentes de energía sobre el total del consumo.
La Eurocámara subrayó que el 40% de toda la energía de la UE se utiliza en edificios y que existe un enorme potencial para reducir este consumo de forma que las energías renovables puedan cubrir todas las necesidades energéticas en este sector.
Por ello, los diputados piden al Ejecutivo comunitario "medidas eficaces para la promoción de la calefacción y refrigeración por medio de energías renovables, con objeto de aumentar la proporción de las mismas en la UE desde el 10% actual hasta al menos el doble de ese porcentaje para 2020".
El Parlamento apoya fomentar el uso de biocarburantes en el transporte imponiendo un objetivo vinculante del 10%, "siempre y cuando se pueda probar que esos carburantes se obtienen por métodos sostenibles". También subraya que la producción de vehículos más eficientes "sigue siendo la mejor manera de reducir las emisiones de CO2 y el consumo de petróleo".
En este sentido, los eurodiputados piden que el mensaje que la UE envía a la industria automovilística se centre "menos en la demanda de biocarburantes y más en la demanda de vehículos de bajo consumo energético". Además, afirman que la utilización de automóviles eléctricos y de hidrógeno "desempeñará un papel importante en el futuro".
El eurodiputado verde David Hammerstein aplaudió que se haya eliminado del informe "la alusión a la energía nuclear en la que se asimilaba a las energías renovables", ya que "está totalmente demostrado que no es una energía limpia". No obstante, rechazó el objetivo obligatorio del 10% de biocarburantes porque "obliga a la población a elegir entre comer o conducir".
Por su parte, los socialistas españoles en la Eurocámara reclamaron a la Comisión que presente un marco legislativo "ambicioso" en materia de energías renovables que contemple objetivos vinculantes para la electricidad, el transporte, la calefacción y la refrigeración.
"Las fuentes de energía renovables son imprescindibles para afrontar los retos que tiene ante sí la Unión Europea, responder al agotamiento y encarecimiento de las fuentes de energía convencionales, contener y revertir la dependencia de la importaciones y la lucha contra el cambio climático con la reducción del consumo de combustibles fósiles", dijo el eurodiputado socialista Joan Calabuig a través de un comunicado.