Brasil es el segundo productor del mundo de bioetanol, tras EEUU, y el principal exportador. Pero ni Brasil ni Estados Unidos, las grandes potencias del bioetanol, han desarrollado de la misma forma el biodiésel. Pero los programas de fomento podrían cambiar esta situación.
La obligatoriedad del 2% de biodiésel, B2, es el primer paso del Programa Nacional de Producción y Uso de Biodiésel de Brasil que prevé incrementar la mezcla en los próximos años. De forma paralela se busca obtener materias primas alternativas para fabricar biodiésel como soja, jatropha, ricino, palma grasas animales, entre otras posibilidades.