(El Mundo).- "Se agota el tiempo", declaró el comisario europeo de Medio Ambiente, Stravos Dimas, para señalar el momento crítico en el que se encuentran las negociaciones de la Cumbre de Bali, cuando quedan sólo unas horas para su finalización.
El comisario no escatimó comentarios negativos para referirse al completo bloqueo de las negociaciones: "La última propuesta de EEUU no ayuda nada a los avances", dijo lacónicamente en una rueda de prensa en la que no se aceptaron preguntas.
EEUU lanzó un nuevo órdago, quizá en respuesta al boicot anunciado el día anterior por la UE a unas reuniones convocadas por Washington. En el nuevo texto presentado en la mesa negociadora, este país propone que se apruebe la obligatoriedad de compromisos de todos los países en reducir las emisiones, pero sin diferenciar países ricos de pobres.
"Este texto es inaceptable para la UE. Compartimos que todos deben contribuir, pero con objetivos diferenciados", señaló Dimas. "Aceptarlo sería una irresponsabilidad y una falta de visión realista", añadió.
El órdago lanzado por EEUU ha sido recibido como "una bomba" por las ONG presentes en Bali. Para WWF el texto es "igual que no querer hacer nada; una llamada a la inacción". Para Greenpeace, la iniciativa, en vez de ayudar a salir del atolladero de las discusiones, es una "provocación" a las víctimas actuales del cambio climático.
Con todas las espadas en alto y posiciones radicalmente distintas, todo indica que la Cumbre de Bali acabará horas después de lo previsto. Quizá las negociaciones se prolonguen a lo largo de toda la madrugada, algo que ya viene siendo habitual en las Cumbres del Clima.