Todo a punto para la Expo del Agua

La gran Expo dedicada al agua incluso pasada por ella estos últimos días de avenidas fluviales abrirá sus puertas en seis días. A quien le interese el medio ambiente, la naturaleza, la vida y los orígenes de la misma en la Tierra, tiene un lugar donde aprender mucho más sobre este elemento fundamental para la existencia. Del 14 de junio al 14 de septiembre, el H2O será el protagonista del gran circo que tendrá lugar a orillas del Ebro, en la capital maña. El río de mayor caudal de la Península ya no fluye transparente ni limpio frente a Zaragoza. Las ranas que dan nombre al meandro (Ranillas) donde se han removido 25 hectáreas de depósitos aluviales para construir la Expo, tampoco croan. Incluso se ha dragado el fondo de Ebro destruyendo las comunidades bentónicas para permitir el tráfico fluvial de visitantes. No obstante, la Expo Internacional dedicada al agua significará un antes y un después en la cultura hídrica de los españoles y de muchas otras nacionalidades. Zaragoza será durante estos tres meses la capital del agua y el punto de inflexión de lo que se ha venido en llamar nueva cultura del agua: que los ríos vuelvan a ser las arterías del organismo único que es la simbiosis de la Tierra con sus seres vivos. El meandro de Ranillas albergará la gran feria del agua. La mayor parte de las instalaciones son singulares y llenas de personalidad. Por ejemplo, a la muestra se podrá llegar en funicular y en barco impulsado por energía solar. Una vez dentro del recinto llaman la atención numerosos edificios, entre ellos el más alto: la Torre del Agua, donde tendrán lugar la mayor parte de las intervenciones. Aún más innovador resulta el Pabellón Puente, una gran estructura sin líneas rectas que está suspendido sobre el Ebro y que albergará exposiciones. El Acuario fluvial, con especies acuáticas de los cinco grandes ríos de cada continente será uno de los sitios más visitados. Lo mismo que el pabellón de España, una edificación que reproduce la verticalidad de los bosques de ribera. La muestra dedicada al cambio climático es la primera que está dedicada a este fenómeno. Escritores y políticos Para que Expo Zaragoza 2008 logre ser una referencia mundial siempre que se vuelva a hablar de agua, contribuirán escritores de la talla de Noah Gordon, Ian Gibson, Paulo Coelho, Antonio Gala o Alfredo Bryce Echenique que tras su participación firmarán el Manifiesto por el Agua, la Paz y la Literatura. Personalidades como Mijail Gorbachov, Rigoberta Menchu ambos Premio Nobel de la Paz, Jeremy Rifkin o Federico Mayor Zaragoza elaborarán una colección de 15 ensayos inéditos titulada "Agua para la Paz", en la que se expondrán iniciativas de las últimas décadas que hayan contribuido a que el agua sea un elemento de paz entre los pueblos. Los protagonistas también serán los visitantes. En la Tribuna del Agua se espera la participación de 32.000 personas, que podrán asistir a 280 horas de conferencias y debates, impartidos por dos millares de expertos de los cinco continentes, durante los 93 días en que permanezca abierta la Expo 2008. Del agua también se hablará fuera del recinto de la Expo. Durante el fin de semana del 28 y 29 de junio se celebrará el Primer Encuentro Mundial contra la Privatización del Agua y el mal uso que se hace de ella en las concesiones industriales y mineras, que la devuelven a los cauces fluviales cargada de contaminantes. Previamente, el día 25 de junio tendrá lugar el Foro Joven, un proyecto educativo en el que participaran alumnos de 200 institutos de la cuenca del Ebro. Les acompañaran dos centenares de estudiantes de secundaria de Portugal, Francia, Alemania y norte de África. Los escolares elaborarán un decálogo con propuestas y obligaciones de la juventud a favor del agua. El Foro Ético para la Gestión de las Aguas tendrá lugar los días 5 y 6 de julio con la participación de ex ministros como Cristina Narbona (España), Marina Silva (brasil), Mario Soares (ex presidente de Portugal), Kaver Asmal (Sudáfrica), Teresa Cohen (Angola), y personalidades como Domingo Jiménez Beltrán, Leonardo Boff, Vandana Sivha, Danielle Mitterrand, el obispo brasileño Joaquin Piñas o la canadiense Sylvie Paquerot, que elaborarán una Declaración de Principios Éticos. Ese mismo fin de semana tendrá también lugar el Foro Mundial de las Luchas del Agua, que homenajeará a quienes han combatido o han sido damnificados por los grandes proyectos hidráulicos como los de la presa de las Tres Gargantas en China, o el Trasvase del Ebro. Exposición y chapuzón Una exposición mundial, Agua, Ríos y Pueblos, que circulará internacionalmente durante cinco años patrocinada por la ONU hará un homenaje a todos aquellos que se opusieron a proyectos hidrológicos en el mundo. En lo concerniente a España figurarán los casos de Itoiz o Riaño. Paralelamente a la Expo se llevará a cabo en el río Ebro el Big Jump (Gran Chapuzón) al que está invitados todos los que quieran darse un baño en el río Ebro a su paso por Zaragoza, para reivindicar la limpieza de los ríos. El Big Jump se celebra en Europa desde hace tres años y culminará en 2015 con un chapuzón que será secundado según los organizadores por 10 millones de europeos. La cita de 2015 coincide con el año en el que la Directiva Marco del Agua estará implementada en la UE y haya logrado al menos una parte de su propósito: devolver a los ríos su virginidad. Como introducción a la Cumbre del Agua, conviene aclarar algunos datos sobre ella en España. Cuando hablamos del agua dulce disponible, es decir, aquella que se acumula en embalses y es destinada al consumo, es necesario señalar que aproximadamente el 75% de ella se destina al regadío agrícola, mientras que la industria gasta el 15% y los ciudadanos el 10% restante. Repartida la tarta líquida, es preciso añadir que bastante menos de la mitad de los regadíos tienen un consumo mínimamente eficiente, por lo que el 35% de toda el agua embalsada se derrocha en cultivos, que en la mayoría de los casos reciben una, dos y hasta tres subvenciones distintas. Y eso sin contar que los embalses y las conducciones han sido pagadas del Erario público a costes muy elevados, y daños ambientales muy graves a más de 1.200 valles donde se ubican, que son ya irreparables. EL MUNDO MADRID