La CNE propone una solución intermedia a los problemas de introducción de los biocarburantes en España. El organismo regulador se hace eco en parte en su informe de las peticiones de las petroleras y del estado del mercado de combustible español y sugiere una mezcla flexible de biocarburantes en el suministro de gasolina y gasoil en España, frente a la cantidad fija del 5,83% que pide Industria.
El organismo regulador plantea en su informe sobre el proyecto de Orden Ministerial presentado por Industria que las petroleras no tengan que cubrir este porcentaje fijo del Ministerio tanto con biodiésel como con bioetanol. La idea es que cubran este porcentaje adaptándolo a la realidad del mercado.
Sin embargo, esta flexibilidad propuesta no es absoluta. El bioetanol deberá estar presente en al menos un 2,5% de la mezcla final de gasolina. El diésel, por su parte, tendrá que contar con una cantidad mínima de mezcla de biodiésel del 3,5%, siempre y cuando el resultado final sea que se alcance el objetivo del 5,83% de Industria.
Fuentes de la CNE explicaban ayer que el Gobierno aboga por un modelo al estilo francés, con rigidez en los porcentajes. Por otro lado, el organismo regulador aboga así por un modelo intermedio, en el que se recoja la flexibilidad, pero no de forma absoluta como ocurre en algunos países.
Actualmente, la mezcla de biodiésel y bioetanol en el gasoil y la gasolina, respectivamente, existe pero no hay obligación de comunicar un porcentaje de mezcla si no es superior al 5%. Las patronales del sector calculan que se estará mezclando una cantidad de biocarburantes en el entorno del 3%.
El margen de flexibilidad irá aumentando en los próximos años hasta llegar al objetivo del 5,83% en valor energético por litro, no en volumen. Si Industria propone un 1,9% de mezcla no obligatoria en 2008, el regulador defiende un 1,9% mínimo de biodiésel y un 2% mínimo de etanol para este año. En 2009, frente al porcentaje fijo del 3,4% de Industria, se aboga por un 2,7% para el biodiésel y un 2,2% para el bioetanol.